Una de los indicadores de que una comida o una cena ha sido todo un éxito es la sobremesa. Ese tiempo distendido donde las conversaciones se suceden en torno a una mesa donde el disfrute se eleva si se comparte con un destilado de calidad en la mano.
Para que ese disfrute compartido sea mayor, el destilado debe poder tomar varias formas: ya sea solo, con hielo o combinado con algún cóctel. Como es el caso del ron.
¿En qué fijarse para detectar un ron de calidad?
Y si queremos que nuestra copa contenga un ron de calidad, podemos prestar atención a un par de detalles, para acertar. Tal y como aconseja Ana Suárez, brand ambassador de Ron Barceló, podemos fijarnos, primero, en la lágrima que deja el ron en el interior de nuestra copa, cuando lo movemos: “La velocidad a la que caen y el número de ellas nos dan pistas sobre si el ron es más joven o por el contrario más envejecido, donde normalmente la lágrima cae lentamente”. Así, cuanto más densa y lenta sea esa lágrima, estaremos ante un ron con un envejecimiento mayor.
Después, una vez ya lo estamos degustando, habrá que fijarse en que “los matices sean sutiles” pues si encontramos sabores muy marcados a chocolate, vainilla o plátano, sin que haya un abanico amplio de matices, nos puede estar dando una pista de que el ron que tenemos en la copa tiene sabores añadidos y no los propios que tiene de forma natural. Por tanto, si encontramos una gama rica en aromas, podremos constatar que estamos ante un ron de calidad.
Esta amplitud de detalles la podemos encontrar en la gama Imperial de Ron Barceló. Por ejemplo, en el Ron Barceló Imperial, elaborado a partir del néctar de una selección de caña de azúcar dominicana y envejecido de forma natural durante una década, podemos apreciar los aromas a crema de mantequilla, vainilla intensa, nueces caramelizadas, cerezas secas y mermelada de piña, seguidos de recuerdos especiados, tostados, a nuez de cola y moca.
Mientras que, en uno más añejo podremos encontrar otra gama aromática, aunque igualmente compleja, como en el Ron Barceló Imperial Premium Blend 40 aniversario, que es una mezcla especial de las reservas pasadas del Barceló Imperial, maduradas en cortes seleccionados de roble americano y barricas de roble francés, con distintos grados de tueste, y con posterior tiempo de reposado en toneles europeos. Aquí encontraremos ricos matices que van desde los recuerdos a crême brûlée, pasas caramelizadas y guindas secas, a los aromas a nuez, las notas especiadas, a madera y tabaco.
¿Cómo consumir un ron de calidad?
En cuanto a la forma de consumirlo, Ana Suárez prefiere no imponer normas, pues cada uno, según sus preferencias tradiciones o incluso región (según sea más o menos calurosa), optará por una forma u otra de consumo: “Si alguien quiere consumir su ron combinado y elegir un buen ron está bien, y siempre habrá gente que quiera apreciarlo más en profundidad, y adquiera el hábito de tomarlo solo, o experimentar con la coctelería”.
Lo único que habrá que escoger bien es el tipo de ron y el perfil de aromas que tenga, para escoger si se quiere degustar solo, o con hielo, apreciando cada uno de sus aromas y cómo se van expresando y cambiando en la propia copa con el paso del tiempo; o si bien, vamos a combinarlo, adentrándonos más o menos en la coctelería.
Esa mezcla puede ser con diferente tipo de refrescos o escogiendo zumos y frutas para perfeccionar la combinación: desde cítricos como la lima, el limón o la naranja, a la piña, el coco o el mango.
¿En qué momento de las celebraciones navideñas es mejor deleitarse con un ron?
En estas fiestas, la brand ambassador de Ron Barceló, confiesa que el mejor momento para disfrutar de un ron es la sobremesa: “Para mí sin duda las sobremesas infinitas que se alargan hasta la cena… ese momento de conversación con familia y amigos”.
Un momento de placer y disfrute donde compartir anécdotas y alegrías, mientras se degusta un ron, ya sea solo, en copa, o en combinado, o incluso, si se quiere ser algo más original, en cóctel.